ENSAYO
diferencia respecto de las competencias en la producción textual entre un docente que utilice y otro que no utilice TIC
Ambos deben partir de la comprensión de la esencia del término comunicación, en la cual, el texto y la palabra hablada cumplen el papel más importante, siendo estos, la forma más básica de comunicación. El autor no aclara que el texto es una secuencia ordenada de caracteres (dibujos) que se adoptó por mutuo acuerdo, siendo el grafo una palabra más adecuada para expresarlo, puesto que en épocas primitivas, se usaban grafos secuenciales para formar textos, y ahora se utilizan otros un tanto más internacionales (abecedario) para representar nuestras ideas en lo que hoy se conoce como texto. Por lo tanto, se debe dejar claro para esta reflexión, que las imágenes y otras representaciones comunicativas propiamente dichas también representan textos en la medida que transmiten ideas.
E-learning o Informática educativa, necesita de algunos términos más. Uno que represente mejor a un docente que utiliza las herramientas tecnológicas de la información y la comunicación y lo diferencie del que no. Llamaremos a este nuevo modelo de docente como e-teacher, dejándonos permear también por la influencia del globalizado idioma inglés.
Las competencias que debe tener el e-teacher, deben incluir el conocimiento de la computabilidad, puesto que la red ofrece más recursos para plasmar ideas, como la imagen animada y el video, construyendo un concepto más complejo para la palabra “texto”, en cambio el maestro tradicional que no las Utilice, solo está armado con el poder de su redacción para lograr manifestar sus ideas en un escrito.
EL e-teacher debe tener en cuenta la capacidad de los textos digitales de tornarse infinitos, debido a la conexión de documentos en el concepto de hipertexto y la capacidad de acceso aleatorio que poseen. Características textuales que exigen del e-teacher, competencias para la producción hipertextual mientras que el libro impreso, con su forma secuencial de transmitir las ideas tiene un umbral bien definido y no exige tales competencias de los maestros.
La aleatoriedad de acceso mencionada anteriormente, es una característica que merece ser bien tratada, porque resulta ser interesante para el hipertexto puesto que según el libro analizado, exige al estudiante capacidad argumentativa y de comparación entre documentos. Pero opino que innegablemente esto también debe hacerlo el e-teacher, cuya obligación es cultivar y practicar la competencia de sintaxis hipertextual para organizar las ideas y plasmarlas en la red, ya que la coherencia de los textos puede, en un momento dado ser cuestión de secuencialidad. Concepto que se presenta como una paradoja, puesto que es una realidad que el hipertexto hace que se concatenen documentos fragmentados y traídos al lector desde lugares remotos, pero no se puede olvidar que esa aleatoriedad tiene que corresponder a una secuencia previamente identificada para no hacer perder al lector.
Por último se debe mencionar la sensibilidad que debe tener el e-teacher para explicar los conceptos con un lenguaje atractivo, concepción que desde el punto de vista pragmático, hace reflexionar en cuanto al uso del lenguaje y dándole a éste un significado diferente dentro de la sociedad so pena de quedar olvidado en la inmensidad de las redes computacionales y la internet.